sábado, 27 de mayo de 2017

La del finiquito en diferido da otro gran espectáculo en el Día de las Fuerzas Armadas.


Para defender el aumento de los gastos militares y la sumisión a los dictados militaristas de la OTAN, la señora Dolores de Cospedal, nueva ministra de Defensa, ha dicho esta barbaridad:


Pero aparte de esta metedura de pata radical de esta señora -metedura de pata que al fin y al cabo no es más que otra anécdota pringosa y rancia de un Partido Popular que naufraga en la corrupción ideológica más grave- importa subrayar que lo que la población española rechaza no es solamente el incremento de los gastos militares [que los sórdidos telediarios del gobierno intentan justificar a base de dedicar mucho tiempo a los atentados terroristas en todo el planeta], sino también la política DESCARADAMENTE BELICISTA de un PP que no cesa de meternos en conflictos armados en distintos países:


Atención a lo que el nuevo Jefe de Estado Mayor, general Fernando Alejandre, se acaba de atrever a declarar, a las bravas, por su cuenta y creyéndose él un parlamentario o un jefe de gobierno o un partido político:



Pienso que el Parlamento debería reprobar contundente e inmediatamente a este general y advertirle formalmente de que no vuelva a pronunciarse sobre el envío de tropas españolas a países en guerra, porque este tipo de anuncios no son de su competencia hasta que los diputados electos así lo decidan.